¿Sabéis esas veces que os sentís imparables? Como si el mundo se fuera a detener solo para que pudierais contemplar ese preciso instante una vez más, o para hacer más larga esa mirada, o esa sonrisa. Como si madrugar fuera solo una excusa para explotar más el día, como si el té supiese mejor si suena rock de fondo al amanecer, o esa ventana del bus pudiera transportarte junto a esa melodía con solo cerrar los ojos. Hay días en los que estás hasta arriba pero te das cuenta de te apasiona lo que haces. No hacen falta grandes razones para sentirnos felices, solo disfrutar del momento, o quizás del rock, de la moda, de la ciencia, de la filosofía, de 8 ruedas, de despeinarse, de reírse hasta morir, de un buen libro, de ese aroma, ese rojo de labios, benzofenona, tu chaqueta favorita, chocolate caliente y de muchas bonitas casualidades que aparecen en cualquier momento.
Otra sesión con cámara en manos de Nagore para sacar mi lado más alternativo. Ya sabéis que las camisas con prints originales son mi debilidad y para estos días son perfectas para lucirlas sin chaqueta ni prendas superpuestas, esta de choies me gusta muchísimo por los tonos cálidos y con las medias con ese toque grunge no puede ser más de mi estilo. Últimamente estoy más en las nubes que en la tierra, nos vemos pronto con más novedades que han llegado hoy mismo a mi armario.
Camisa/ Shirt: Choies (la misma aquí/the same here)
Shorts: Bershka
Medias/ Tights: Primark
Botas/ Boots: Kaimo
Bolso/ Bag: Primark
Glasses: Giant vintage